Las Licencias Creative Commons fueron creadas en 2001 para apoyar a los usuarios en el ejercicio de sus derechos sobre la propiedad intelectual de una manera más flexible que las licencias de software libre. Permiten compartir creaciones como música, películas y fotografías bajo condiciones como requerir atribución de la autoría, prohibir usos comerciales, o permitir solo copias idénticas sin trabajos derivados. Existen cuatro tipos principales de licencias Creative Commons.